Endodoncia
Las endodoncias son procedimientos realizados por endodoncistas.
El proceso consiste en la eliminación, total o parcial, de la pulpa de un diente y el posterior sellado del conducto pulpar.
La necesidad de la endodoncia viene del dolor generado por una causa, (que veremos posteriormente), que proviene de esta pulpa, que al ser la parte más interna del diente y contener los nervios y vasos sanguíneos, es también la más sensible, por lo que el dolor que podrías llegar a sentir sería insoportable.
Se necesita hacer una endodoncia cuando la pulpa de la pieza dental está enferma, dañada o incluso muerta.
Existen diferentes motivos para hacer una endodoncia. Cuando se produce una lesión en el nervio del diente esta puede ser provocada por 3 motivos:
- Que haya una infección en el diente
- Que se haya producido un traumatismo o golpe en el diente
- Que el diente se haya desgastado
El retratamiento de endodoncia se realiza cuando la endodoncia previamente realizada fracasa.
El fracaso de la terapéutica de la endodoncia puede ser debida a una contaminación de la zona por una caries dental o una pérdida de la restauración después de la endodoncia.
En estos casos existe una filtración lo que permite que las bacterias y los agentes irritantes penetren en el conducto y puedan causar patología de nuevo.
La endodoncia puede fallar en ocasiones por realizar una incompleta limpieza y desinfección. Si no se logra remover todos los irritantes que existen dentro del conducto y no se desinfecta adecuadamente, estos continúan dentro del conducto y pueden volver a producir patología y sintomatología.
El retratamiento de endodoncia se basa en cuatro fases principales: la eliminación del contenido de los conductos y la remodelación, la limpieza, la desinfección y la etapa final que es la obturación de los conductos.